Para los niños con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) o Trastorno del Espectro Autista (TEA), el mundo puede parecer un lugar impredecible y abrumador. La anticipación, entendida como la capacidad de prever lo que ocurrirá a continuación, es una herramienta fundamental para ofrecerles estructura, reducir la ansiedad y facilitar su adaptación a distintas rutinas y entornos.
Por qué es esencial anticipar
En el caso del TDAH, la dificultad para regular la atención y el comportamiento hace que los cambios inesperados puedan resultar extremadamente desestabilizadores. En el autismo, los niños a menudo presentan una necesidad muy marcada de rutinas y previsibilidad, y cualquier alteración sin previo aviso puede generar crisis de ansiedad o desregulación emocional.
La anticipación no solo prepara emocionalmente al niño, sino que también le brinda un sentido de control sobre su entorno. Esta preparación puede lograrse de múltiples formas: a través del lenguaje, de pictogramas, de calendarios visuales o del uso de herramientas temporales.
Herramientas visuales y temporales para anticipar
Los apoyos visuales como horarios, secuencias de pasos y temporizadores ayudan a los niños a comprender lo que sucederá, cuándo y cuánto tiempo durará. Esta estructura visual convierte lo abstracto (el tiempo, por ejemplo) en algo concreto y manejable.
Unikids, un emprendimiento enfocado en el bienestar de niños neurodivergentes, ofrece varios productos que apoyan este proceso. Uno de los más útiles es el temporizador visual, una herramienta que muestra de forma gráfica el paso del tiempo, ayudando a los niños a prepararse para transiciones como el fin del juego o el inicio de una tarea.
Otro recurso valioso son los relojes de arena, que permiten visualizar el paso del tiempo de forma tranquila y sensorial. Estos productos no solo ayudan a anticipar cuándo termina una actividad, sino que también pueden utilizarse como recursos de regulación emocional, ya que su movimiento constante y repetitivo tiene un efecto calmante.
Beneficios de anticipar en el día a día
- Reducción de la ansiedad: Saber qué esperar reduce la incertidumbre, lo que disminuye los niveles de ansiedad y estrés en los niños.
- Mejor autorregulación: La anticipación permite a los niños prepararse mental y emocionalmente para lo que viene, favoreciendo una mejor respuesta conductual.
- Mayor independencia: Cuando un niño entiende la estructura del día y los pasos a seguir, puede desenvolverse con más autonomía.
- Transiciones más suaves: Las transiciones suelen ser puntos conflictivos. Con una herramienta visual que indique cuánto tiempo queda, los niños pueden cambiar de actividad con menos resistencia.
Consejos para implementar la anticipación en casa
- Usa lenguaje claro y concreto para explicar qué pasará.
- Introduce rutinas visuales, usando pictogramas o imágenes reales.
- Incorpora herramientas de medición de tiempo como temporizadores visuales o relojes de arena.
- Sé constante en las rutinas y da avisos previos antes de los cambios.
- Celebra pequeños logros cuando los niños se adaptan positivamente a las transiciones.
Conclusión
La anticipación es más que una técnica educativa: es una necesidad para muchos niños con TDAH o autismo. Les brinda seguridad, los ayuda a regular sus emociones y les permite participar activamente en sus entornos familiares, escolares y sociales. Productos como el temporizador visual y el reloj de arena sensorial de Unikids no solo complementan esta estrategia, sino que la convierten en una experiencia tangible, comprensible y amigable para los niños.